La policía china detuvo a cuatro árbitros de la liga nacional, entre ellos el más conocido del país, "Silbato de Oro" Lu Jun, por su presunta implicación en la red de apuestas y amaño de partidos que ha golpeado al fútbol de China en los últimos meses, informó hoy la prensa oficial.
Lu, que pitó en el Mundial 2002, y otros tres compañeros son los primeros árbitros implicados en el escándalo, que ya se ha saldado con la detención de más de una veintena de altos cargos, entrenadores y futbolistas, entre ellos dos ex vicepresidentes de la Federación.
Los precios de un soborno
"China Daily" incluso aporta hoy una lista de "precios" para comprar partidos en la liga china: según su información, cuesta unos 15.000 dólares (11.000 euros) sobornar a un árbitro, o unos 75.000 dólares (55.000 euros) comprar a todo un equipo en un partido.
Paradójicamente, la selección nacional china logró en febrero uno de sus primeros triunfos internacionales, la Copa del Este de Asia, logrando imponerse a naciones de la zona tradicionalmente de mayor calidad, como Japón o Corea del Sur.
China sólo ha disputado unos Mundiales, los de 2002, y ni siquiera ha ganado nunca la Copa de Asia, aunque ha sido finalista del campeonato continental en dos ocasiones, la última de ellas en 2004.