Lorenzo trabaja para ser el piloto perfecto

El piloto diez, como la mujer diez, no existe, pero Jorge Lorenzo trabaja duro, a diario desde 2002, con un particular método de preparación con el que busca superarse a sí mismo a cada carrera que pasa y, sin pretenderlo, podría acabar convirtiéndose en el piloto perfecto. Su aparición en MotoGP, allá por 2008, resultó estelar, pero con el paso de las temporadas ha sabido pulir errores del pasado. Ya no es un manojo de nervios antes de la salida, sabe encajar una derrota, lee mejor que nunca las carreras, adelanta con más contundencia. En definitiva, su progresión no conoce límites por un trabajo en el que prima tanto lo físico como lo psicológico.

Anoche viajó a Italia, para comparecer en calidad de líder en el espectacular circuito de Mugello, el jardín de Rossi, sólo profanado el año pasado desde que la clase reina se llama MotoGP (2002). En otro tiempo, correr en casa de Valentino habría supuesto una prueba de fuego para su sistema nervioso, pero ahora, y gracias a técnicas como la psicología deportiva y la sofrología, que ha incorporado a su método de trabajo desde la temporada pasada, la afronta con la seriedad y la importancia de cualquier otra, pero sin ninguna carga psicológica especial. Ni siquiera las ganas de revancha por lo que El Doctor le hizo no hace mucho en su casa, Montmeló, cuando le quitó la victoria en la última curva, le hacen cambiar el discurso. "Es una carrera más", dice, como si lo fuera, porque en realidad, de ganar, sería el golpe de gracia perfecto contra el italiano...

"La preparación de Jorge cambia cada año y la sofrología entró en juego en 2009, trabajándola aún junto a la psicología deportiva con Pep Font, con técnicas de meditación trascendental", asegura Marcos Hirsch, su representante y preparador, que resume la clave de todo en que "la confianza en uno mismo se gana con el tiempo, la madurez, la seguridad, la felicidad y viviendo tranquilo. Y eso es algo de lo que disfruta Jorge en estos momentos".

De la psicología se conoce más que de la sofrología, pero Hirsch la simplifica diciendo que "no es ni más ni menos que una herramienta, útil para cualquier persona, que te saca de diferentes problemas. En el caso concreto de Jorge, la sofrología tiene un enfoque muy específico de las carreras, para aprender a cortocircuitarse cuando surge un problema y cambiar el chip automáticamente. Principalmente, se usa cuando la moto te da una sacudida o recibes un toque con otro piloto que desvirtúa tu carrera. Ahí es cuando se tiene la necesidad de volver a la normalidad y cuando esta técnica es efectiva. Cuando todo va bien no hace falta. Ése es el enfoque que vale para Jorge, aunque para un divorciado o un tío que se quiera suicidar también pueda valer con un enfoque diferente".

Hay un ejemplo muy reciente para entender la valía de la sofrología. Ocurrió precisamente en Mugello, el año pasado, cuando el mallorquín se cayó en la vuelta de formación de la parrilla. Lejos de perder el control de la situación, cambió de moto en el box, regresó a la parrilla y se marcó una espectacular carrera en la que terminó segundo, tras Stoner, y por delante del coco Rossi...

Muy grande como piloto, este año le esta poniendo las cosas muy dificiles
a Rossi, veremos que pasa en casa del Doctor 46.

no preocuparse que este año tenenos no al doctor 46 si no al super doctor LORENZO que va como los AVIONES. jejejejeje