España, a octavos

La selección española se clasificó para los octavos de final del Mundial tras ganar a Chile por 1-2 en un partido que tenía una pinta muy mala para España en el inicio del encuentro pero en el que esta vez los de Del Bosque sí que estuvieron acertados ante la portería contraria.

No fue un camino de rosas el encuentro ni mucho menos. En el inicio del partido, la presión muy arriba de los chilenos ahogó el fútbol de toque del equipo de Del Bosque. Con Busquets y Xabi Alonso sobrepasados y Xavi desaparecido, el encuentro tenía muy mala pinta para los intereses españoles.

El partido de España no fue bueno pero sí muy efectivoSólo balones en largo, a eso se reducía el fútbol del equipo que mejor juego ha practicado el mundo en los últimos dos años. La circulación de la pelota era inexistente y los chilenos cada vez rondaban más la portería de Casillas ante el desconcierto generalizado.

Sin embargo, caprichos de este deportes, uno de esos balones largos sin muchas opciones caía en los pies de Torres, Claudio Bravo salía en falso y el balón llegaba a David Villa, que marcaba un golazo desde unos 35 metros con la zurda aprovechando que la portería estaba vacía.

El tanto hizo que los chilenos se vinieran más arriba y España empezó por fin a encontrar huecos. Un balón robado por Iniesta en el medio campo llegaba a David Villa, que se la devolvió al genial centrocampista y éste con un toque sutil daba un pase al fondo de la red. La jugada salió redonda para España, pues Estradax era expulsado por una falta sobre Torres que no pareció tal.

Increíblemente, en el partido que peor lo estaba haciendo la selección era en el que mejor estaban yendo las cosas. Todas las ocasiones falladas ante Suiza y Honduras se habían metido esta vez y el partido al descanso parecía presentar un fácil panorama para España.

Pero el inicio de la segunda parte no pudo ser peor. Los españoles salieron dormidos y Chile mordió en el inicio logrando reducir distancias por medio de Millar, ante la sorpresa de España, desbordada ante un conjunto en inferioridad.

La Portugal de Cristiano Ronaldo espera en octavos de final

Del Bosque reaccionó introduciendo a Cesc Fábregas y el dominio pasó a ser nuevamente de los españoles, pero sin pegada. El juego de toque empezó a aburrir a Chile, que empezó a recular ante las numerosas combinaciones del rival y según avanzaban los minutos parecía que a ambos les convenía el resultado. Con el empate en el otro partido, el Chile-Honduras, ambos equipos estaban clasificados y se empezó a notar.

España debió sentenciar en los minutos finales, pero otra vez tuvo un flojo final de partido. El objetivo estaba cumplido y el combinado hispano se dedicó a mover el balón esperando a que el árbitro diera el último pitido del encuentro. Con mucho sufrimiento, España está en octavos de final, donde se medirá a Portugal.
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