En junio de 2009, los Mossos desarticulaban en Barcelona una mafia china que explotaba en talleres clandestinos a 450 orientales a los que había traído ilegalmente a España. Hubo 77 detenidos. Poco después, 58 quedaron en libertad.
La sensación de frustración es a veces grande y complica nuestra labor
Sólo es un ejemplo, pero que sirve para reflejar la realidad: una dura realidad, lo difícil que es para las Fuerzas de Seguridad luchar contra el crimen organizado. De la eficacia policial nadie duda: en 2009 (últimos datos) se desarticularon en España 561 bandas organizadas (otras 55 también fueron investigadas: 616 en total), frente a las 467 bandas que cayeron en 2008 y las 415 del año 2007.
Tal éxito policial permitió detener a 5.881 integrantes de estos grupos, 2.300 arrestos más que en el año 2004, es decir, un incremento del 64%. Pero las estadísticas también demuestran que pocos de estos mafiosos acaban en prisión. De esos casi 6.000 detenidos, apenas 1.500 acabaron en la cárcel, ni el 25%.
"La sensación de frustración es a veces grande y complica nuestra labor", señalan fuentes policiales dedicadas a combatir el crimen organizado (6.708 agentes en España). "Sólo van a prisión los cabecillas, y algunos mandos intermedios. El resto de la banda, perfiles bajos, no acaban en prisión. La respuesta judicial es muy tibia", explican las mismas fuentes. Y es que los jueces los castigan como colaboradores y sólo les imponen medidas cautelares, como las de comparecer cada cierto tiempo en un juzgado, algo que raramente cumplen.
Se van a otras bandas
Los que quedan en libertad lo tienen claro: "No pasa mucho tiempo y ya están en circulación en otras bandas o formando nuevos grupos", señalan desde la Guardia Civil. Y ponen como ejemplo una banda desarticulada en marzo de este año: la operación Junco. Se detuvo a 17 de sus miembros, todos españoles, especialistas en asaltar a camioneros en las carreteras. En 57 golpes acumularon un botín de 6 millones. Muy violentos, una decena de ellos tenían antecedentes por robo y eran viejos conocidos de los agentes. Esta regeneración de las bandas es una constante. De las 616 investigadas en 2009, más de la mitad, 360, eran nuevas y 207 no han sido desarticuladas totalmente, por lo que parte de sus miembros siguen libres.
Si metiéramos en prisión a todos los que detenemos no habría sitio en las cárceles
"Así es el sistema y es difícil cambiarlo. Si metiéramos en prisión a todos los que detenemos no habría sitio en las cárceles. Pero no hay que olvidar que meter en prisión a los cabecillas y jefes ya es un paso importante", explica otro policía que prefiere ver la botella medio llena. Y recuerda que la brigada especial que se creó para expulsar a extranjeros delincuentes echó de España el año pasado a 7.591 reincidentes, "muchos de ellos miembros de estas bandas".
La mezcla de españoles y extranjeros es otra máxima de las mafias que actúan aquí. En el 79% de los grupos investigados participaban nacionales. De los 5.881 detenidos el año pasado, 2.994 (el 51%) eran extranjeros.
¿Estadísticas abultadas?
Las críticas a Interior también están latentes entre estas unidades policiales: "A Interior le gusta a veces engordar estas estadísticas. Y hemos visto cómo meten en crimen organizado a tres tíos que trapichean con droga en una zona de Madrid. Eso no vale".
A Interior le gusta a veces engordar estas estadísticas
Las cosas parece que van a empezar a cambiar. La reforma del Código Penal, que entrará en vigor en diciembre, aporta un nuevo capítulo que penará de forma distinta a las organizaciones criminales. Tendrán mayores condenas por su estructura compleja y la amenaza que suponen.
Un paso adelante si se tiene en cuenta el fracaso que ha supuesto la figura de la asociación ilícita, que en muy pocos casos se aplica: "Sólo en las bandas que se dedican al tráfico de drogas a gran escala se aplica más mano dura".
¿Qué es el crimen organizado?
Para Interior, es el top de la delincuencia: aquellos grupos formados por más de dos personas, con una organización jerárquica, que cometen delitos graves y que tienen una actuación prolongada en el tiempo. El 86% de las bandas investigadas el año pasado llevaban menos de tres años operando. Los que trafican con drogas encabezan el listado (462 grupos). En segundo lugar están las bandas de atracadores y ladrones (340).
http://www.20minutos.es/noticia/812248/0/mafiosos/entran/prision/