Por lo general, las personas piensan que "como mínimo, debe tomar ocho vasos de agua al día para mantenerse hidratado", ‘si tiene sed es porque está deshidratado, tomando agua se le pasará" o "si consume bebidas, con cafeína perderá líquido".
El mito de la deshidratación se ha enraizado tanto en la conciencia colectiva que, tal vez, sorprenda saber que las premisas mencionadas anteriormente tienen un mínimo apoyo científico.
Al respecto, la nutricionista Mónica Reinagel explicó un poco el panorama a través de un artículo en The Huffington Post.
Beber agua es un buen hábito
Es necesario resaltar que una persona, en promedio, necesita alrededor de dos litros de agua al día para reemplazar lo que se pierde a través de funciones biológicas como la respiración, la sudoración y la orina. Además, nos ayuda a prevenir los cálculos renales y el estreñimiento.
Sin embargo, eso no significa que obligadamente se deba tomar ocho vasos de agua al día para mantenerse hidratado, pues también se puede obtener líquidos de los alimentos que se consumen a diario, especialmente de las frutas y verduras.
Beber té o café no deshidrata
Consumir café, té u otras bebidas con cafeína no causa deshidratación en el cuerpo. La cafeína puede actuar como un diurético, aumentando la producción de orina. En pocas palabras, el cuerpo retendrá la misma cantidad de líquido si se bebe una taza de café o una taza de agua.
Además, aquellas personas con más tolerancia a la cafeína tienen menos probabilidades de sufrir un desbalance en su organismo. Mientras más regular es tu hábito de tomar café, tu cuerpo es más propenso a retener líquidos.
La deshidratación es una preocupación legítima en el caso de los ancianos, las personas enfermas o aquellas que están involucradas con el intenso ejercicio y actividad física. Por lo general, la mayoría de gente puede mantenerse hidratado consumiendo una dieta saludable y bebiendo agua u otras bebidas sin alcohol cuando tenga sed.