1. Evita el ruido: Parece obvio, pero a veces se está rodeado de sonidos que se cuelan por una ventana mal cerrada, el aire acondicionado, un ventilador, o una tubería en mal estado, y no se hace nada al respecto. Procura un ambiente silencioso y si no puedes controlarlo todo, tal vez sea conveniente usar tapones en los oídos.
2. Saca el televisor de la habitación: Muchas personas consideran que no pueden quedarse dormidas sin la televisión encendida, pero lo cierto es que verla en la cama o incluso en el sofá, puede impedir un buen descanso. Cierta programación, desde comedia hasta drama, pasando por los noticiarios, puede provocar agitación y ansiedad, en vez del estado de relajación propicio para el sueño.
3. Tabletas, smartphones y laptops fuera de la cama: Revisar el correo electrónico, trabajar, conectarse a las redes sociales, ver videos, escuchar música o enterarse de las últimas noticias con la cabeza sobre la almohada está bastante lejos de ayudar a conciliar el sueño.
4. Tres son multitud: Tener una pareja que ronca, que se mueve mucho o con quien los horarios de sueño no coinciden, es ya una dificultad que hay que revisar e intentar resolver, pero si además se convive con una mascota, la situación empeora. Por el buen descanso de todos, es mejor que el animal tenga su propio espacio para dormir.
5. Ten una cama "de lujo": El estado del colchón, las almohadas y las sábanas pueden afectar la calidad del sueño. Trata de cambiar su colchón según el tiempo recomendado por el fabricante, igual que sus almohadas, y procure tener lencería de telas suaves y frescas, que deben ser lavadas al menos cada semana.