Es un hotel a 60 metros bajo tierra. Para llegar a él deberás bajar por un elevador hasta las cuevas de piedra. Su nombre es el Grand Canyon Caverns y forma parte del atractivo tour de la Ruta 66.
Se localiza al oeste de Arizona y hace un par de meses inauguró una suite en las profundidades del cañón. Para ubicarlo, además de las muchas señalizaciones que hay en el camino, en la entrada está un dinosaurio de más de 10 metros de altura que da la bienvenida.
La suite Grand Cavern con todas las comodidades, donde pueden dormir hasta seis personas, cuesta unos $801 la noche . Tiene muros prehistóricos de piedra caliza que están decorados con luces de diversos tonos y su techo tiene una altura de 20 metros.
En un pasillo contiguo hay dos linces momificados y un estante con objetos y provisiones de emergencia que fueron utilizados durante la Guerra Fría, por si se quedaban atrapados en estas cuevas.
El lugar fue un refugio nuclear y, según cuentan los guías, las raciones que deberían ser suficientes para abastecer a dos mil personas durante 30 días, todavía existen.